viernes, 17 de octubre de 2008

Me doy cuenta que todo cambia, a través de los minutos, las horas, los días, los años; a veces quisiera detener el tiempo o regresar atrás donde papá lo arregle todo, y mamá pueda traer la luna, no quisiera crecer, pero quisiera que los grandes me cuiden que este segura y estable, no quisiera compromisos ni hacerme cargo, no tener responsabilidades. Si existe un lugar así ya quiero ir. Estoy atada a viejos recuerdos, a mis voces infantiles interiores, me entra mucha nostalgia al escuchar y recordar esos momentos, pero así es la vida, cuando era niña no tenia responsabilidades ni compromisos grandes, quería juguetes, dulces, buenos tratos, papá y mamá estaban siempre junto a mí, de vez en cuando hacía un berrinche que a ellos les molestaba, pero comprendían que era un capricho y lo solucionaban.
Por las noches ellos velaban mi sueño, por las mañanas me tomaban de la mano me llevaban a la escuela. Y así pasaron los años subiendo grada a grada poniendo en práctica lo que ellos me enseñaron. Ahora tengo que bajar la luna sola, porque mamá ya me mostró, ahora tengo que arreglar las cosas, sola, porque papá ya me lo enseñó, ahora tengo compromisos, tengo que hacerme cargo, y tengo responsabilidades.
Nada es inalterable, nada es definitivo solo el cambio permanece en el tiempo; hice muchos prejuicios, tengo muchas preocupaciones, en mi cabeza resuenan demasiadas ideologías, muchas palabras, todo eso, menos una sonrisa. ¡Basta!, al fin y al cabo es sentir y nada más…
¡Era tan simple que lo tuve que complicar!, ¡lo sé! mis culpas fueron innecesarias, pero muchas necesarias… ¿Compromisos? Casi todos los cumplí, y el amor que doy no lo puedo explicar, porque no hay un modo de amar, ni los sentimientos se pueden explicar. Comenzaré un día sin vanidades, porque mis excusas cobardes ya no sirven más, a veces insisto sin pensar, pero es necesario escuchar a mi corazón… Y al escuchar su latido sentiré alegría de las tareas cumplidas, satisfacción por compartir otras alegrías; no me lamentaré por las cosas que no me salieron como yo quería, es más de esos errores aprenderé para ir por mejores caminos; no viviré enfrascada de mis recuerdos, pero ¡ojo! nadie borrará esos recuerdos de mi corazón y mi cabeza, cuando vengan esos recuerdos a mi mente los apreciaré, pero luego los dejaré ir con la suave brisa del viento. Viviré mi presente, recordaré y apreciaré mi pasado, y pensaré en mi futuro. Pero lo más importante viviré cada instante y tomaré en cuenta cada detalle de mi presente. Porque mi vida es hoy, porque no sé que pasará mañana.

1 comentario:

- Paulita dijo...

gracias maru por el textito